Cómo construir un “colchón financiero” para situaciones imprevistas

Situaciones financieras imprevistas pueden surgir en la vida de cualquier persona. La pérdida de empleo, gastos médicos inesperados, una avería del automóvil o una reparación urgente del hogar pueden acarrear graves dificultades financieras. Sin embargo, contar con lo que se llama un “colchón financiero” permite atravesar tales momentos sin pérdidas significativas y con menos estrés. Un colchón financiero es un reservorio de dinero que ayuda a cubrir gastos imprevistos o mantener el nivel de vida en caso de una reducción temporal de ingresos. En este artículo, exploraremos cómo crear dicho colchón, qué errores se pueden cometer en el proceso y cómo gestionar correctamente el fondo.

  1. Determina el tamaño necesario del colchón

El primer paso para crear un fondo financiero es determinar su tamaño. En general, los expertos recomiendan acumular una cantidad que permita cubrir tus gastos básicos durante al menos 3 a 6 meses. Esto incluye:
  • Gastos mensuales de vivienda (alquiler, hipoteca)
  • Servicios públicos
  • Alimentos y gastos básicos del hogar
  • Atención médica
  • Gastos de transporte
  • Créditos y otros pagos obligatorios
Sin embargo, la cantidad del colchón financiero puede variar según tu situación personal. Por ejemplo, si tienes hijos o trabajas en un sector inestable, sería prudente aumentar el tamaño del fondo a 6-12 meses.
  1. Crea un presupuesto y comienza a ahorrar

Una vez que hayas determinado la cantidad necesaria, es importante comenzar a acumular. Para ello, elabora un presupuesto personal o familiar donde incluyas una partida destinada a la creación del colchón financiero. En promedio, se recomienda ahorrar entre el 10% y el 20% de tus ingresos mensuales para estos fines. Aquí hay algunas estrategias que te ayudarán a comenzar a ahorrar:
  • Automatización de ahorros: Configura una transferencia automática de una cantidad específica a una cuenta de ahorros justo después de recibir tu salario. Esto te disciplinará y te ayudará a no gastar dinero en compras innecesarias.
  • Optimización de gastos: Revisa tus gastos mensuales y encuentra aquellos que puedes reducir. Esto puede incluir suscripciones a servicios de pago, gastos en entretenimiento o compras no esenciales. Redirige el dinero ahorrado hacia la creación del colchón.
  • Fuentes adicionales de ingresos: Si es posible, busca formas de obtener ingresos adicionales. Esto podría ser a través de trabajos independientes, venta de cosas que ya no necesitas o trabajos temporales. Todo el dinero ganado se puede destinar al fondo.
  1. Elige un lugar seguro para almacenar los fondos

El colchón financiero debe ser de fácil acceso, pero al mismo tiempo estar en un lugar seguro. Muchos se preguntan dónde es mejor guardar estos fondos. Aquí hay algunas opciones:
  • Depósito bancario o cuenta de ahorros: Esta es una de las formas más comunes de almacenar un colchón financiero. Los depósitos y las cuentas de ahorros están protegidos por garantías estatales y ofrecen un cierto nivel de liquidez. Sin embargo, la rentabilidad de estas cuentas es baja.
  • Tarjeta bancaria con interés acumulado: Algunos bancos ofrecen productos de tarjeta con intereses sobre el saldo. Esto es conveniente porque el dinero permanece en la cuenta y está disponible en cualquier momento, generando un pequeño ingreso.
  • Fondos del mercado monetario o bonos a corto plazo: Son instrumentos de inversión con un bajo nivel de riesgo que pueden generar un ingreso modesto. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos activos pueden ser menos líquidos que las cuentas bancarias, y a veces puede ser necesario un tiempo para acceder a los fondos.
Es importante recordar que el colchón financiero no es una inversión, y su objetivo no es generar ganancias, sino preservar y proporcionar acceso rápido a los fondos en caso de necesidad. Por lo tanto, se debe evitar almacenar este dinero en activos de alto riesgo, como acciones o criptomonedas.
  1. Evite errores comunes

Al crear un reserva financiera, muchas personas cometen errores que pueden afectar negativamente el proceso de ahorro. Aquí están los principales:
  • Excesiva confianza en la estabilidad de los ingresos: Aunque su trabajo parezca seguro, siempre existe la posibilidad de perder inesperadamente la fuente de ingresos. No debe depender de la estabilidad de su trabajo o negocio como un factor garantizado.
  • Invertir el colchón financiero en activos de alto riesgo: Como se mencionó anteriormente, el objetivo principal del colchón es preservar los fondos, no multiplicarlos. Invertir en activos de alto riesgo puede resultar en pérdidas significativas en caso de una crisis en el mercado.
  • Usar el colchón para gastos diarios: El colchón financiero debe usarse solo en casos de emergencia. Utilizar constantemente estos fondos para cubrir gastos corrientes anula todos los esfuerzos realizados para ahorrar.
  1. Mantenga el colchón financiero en el nivel adecuado

Una vez que haya logrado acumular la suma necesaria, es importante no olvidarse de reponer el colchón regularmente si ha utilizado parte de los fondos. Regrese gradualmente lo que se ha utilizado, incluso si toma tiempo. Además, revise el tamaño del colchón si sus gastos o situación vital cambian. Por ejemplo, si sus gastos mensuales obligatorios aumentan (como el nacimiento de un hijo o la compra de una vivienda), el tamaño del colchón también debe ser revisado hacia arriba.
  1. Asegúrese de tener un seguro adicional

El colchón financiero es un excelente recurso para la protección temporal, pero también es aconsejable considerar otras formas de asegurarse contra situaciones imprevistas. Considere la posibilidad de contratar:
  • Seguro médico: Para evitar grandes gastos en tratamiento.
  • Seguro de vida y salud: Esto es especialmente importante para aquellos que tienen personas a su cargo.
  • Seguro de propiedad: Para proteger su hogar o automóvil.
Estas medidas ayudarán a reducir los riesgos y evitar que el colchón financiero se gaste en cubrir grandes pérdidas que podrían asegurarse.
  1. Aspecto psicológico

El colchón financiero no solo es un medio para garantizar la seguridad material, sino también un elemento importante de comodidad psicológica. Tener un reserva ayuda a reducir el estrés y la ansiedad en momentos difíciles. Sabrá que, en caso de circunstancias imprevistas, tiene un “paracaídas” que le permitirá tomar decisiones con más confianza, sin caer en pánico.

Conclusión

Crear un colchón financiero no es un proceso instantáneo, pero con un enfoque bien planificado y disciplina, es un objetivo alcanzable. Es importante determinar el tamaño necesario del colchón, elaborar un presupuesto, elegir un lugar seguro para guardar los fondos y evitar errores comunes. El colchón financiero será su aliado confiable en tiempos difíciles, brindándole estabilidad y confianza. Recuerde que el objetivo principal de este reserva no es generar ingresos, sino preservar sus ahorros y mantener su vida en un nivel adecuado en momentos de incertidumbre.